Para los creen que las fotos gastronómicas se hacen siempre con pollos de plástico, ácidos humeantes y manos de modelo, aquí están mis dedos sin manicura francesa que corroboran que la fuente quema y quema mucho. ¡Ro, por favor, dispara ya que me abrasooo! :-)
Hoy cocino yo y esta receta rápida de vacaciones le va a encantar a los que disfrutaron haciendo la Salsa Jack Daniel’s y las Costillas estilo Foster’s. Bueno, aviso, no es exactamente lo mismo pero da el pego en días como hoy, que me he plantado en la una y media de la tarde y no había pensado nada para comer y no podía tirar de latas otra vez ante la Sra. Cuchara. Cuestión de orgullo. Las Alitas de pollo con miel y limón están listas en 45 minutos y el tiempo añadido que tardas en bajar a la pollería a comprar con cara de agobio una docena de alas, unos limones y lo que te falte. La salsa lleva romero o tomillo, miel, el citado limón y ketchup. Yo las he hecho al horno pero el proceso es el mismo si las haces a la barbacoa donde el resultado debe ser la bomba. Por las prisas yo no las dejé macerar pero si eres un poco previsor y reposan un par de horas, la salsa potenciará más el sabor del pollo.
¡Venga, a currar!
- Para las alitas asadas:
- 1 kilo y medio de alitas de pollo SADA®, las recomendamos por ser las más jugosas (12 alas)
- Romero (una rama)
- 20 g de miel
- 20 g de ketchup
- 30 ml de zumo de limón
- Pimienta negra
- Sal
- Para la guarnición (opcional):
- Patatas sin pelar de tamaño mediano (1 por persona).
- Precalienta el horno a 180º o 200ºC (si las vas a asar de inmediato).
- Lava y limpia bien las alas de pollo. Las secas y las dejas esperando su momento en una bandeja de horno.
- Con Thermomix® o batidora, preparamos la salsa. Introduce en el vaso el romero, la miel, el ketchup y el zumo de limón, pimienta y sal al gusto y a mezclar 10 segundos, Velocidad 4.
- Ahora vierte las salsa sobre las alitas reservadas en la fuente. Úntalas bien todas para que se mojen de la salsa y reserva. Si las dejas unas horas macerando quedarán más ricas.
- Lava las patatas que necesites para la guarnición. Las secas y sin retirar la piel, sobre un papel de aluminio, las pinchas con un tenedor y les pones sal y pimienta. Las envuelves y al horno. A un lado de tu rejilla pondrás en envoltorio de patatas en papel de aluminio y al otro tu bandeja de alitas maceradas.
- El tiempo total de asado es de unos 45 minutos a 180º-200ºC con calor arriba y abajo. Cada 10 minutos debes darle la vuelta a las alitas para que queden bien hechas por todas sus caras y sobre todo doradas y crujientes. Y ya están listas para comer.