Una de las cosas que más nos gusta en casa de esta época del año que va desde Halloween hasta la Navidad es que al bajar un poco las temperaturas y hacer peor tiempo, aprovechamos los findes para cocinar todos juntos y pasear con Clara y Camilo. A la cocina -como a la vida- venimos a divertirnos y a pasarlo bien siempre respetando a los demás. Suficiente estrés llevamos todos de lunes a viernes como para no poder disfrutar un poco de dos días de alivio. Yo lo intento aunque os confieso que cuando una receta no sale, aunque sea sábado o domingo, me enfado igualmente :D
Siempre os digo que en la cocina la familia debe trabajar como un equipo y creo que es una manera natural que fortalece las relaciones entre tu pareja, los amigos o los pequeños y pequeñas de casa que aprenden que con la suma de muchas manos, se hacen cosas más grandes y mejores. Últimamente estoy preocupada con la pérdida de esa conciencia social colectiva. No sé si será solo cosa de las grandes ciudades pero me aterra ver que la gente está cada día más tensa y va a su rollo, es más individualista y egoísta. Se disipa aquella frase que me decían de pequeña del “no hagas a los demás lo que no te gustaría que te hicieran a ti”. No augura nada bueno esto, eh!
Bueno, no me pongo más filosófica y os presento la receta que hemos elegido para hoy pensando en la noche de Halloween. Os confieso que estas galletas mironas han salido después de bastantes pruebas así que llevamos un buen empacho durante toda esta semana. Me encanta aquello de “Javi, cierra los ojos y dime cuál te parece que está mejor de estas galletas“. Las primeras nos salieron muy quemadas y los ojos desaparecían por el calor del horno. Creo que el esfuerzo ha merecido la pena y estas han quedado muy ricas y sobre todo muy divertidas.
Hemos dejado las cookies en una bandeja junto a la entrada de casa para ofrecer a cualquiera que venga y llame al timbre: ¿Truco o trato? Espero que no se corra la voz o me veo a todos los niños del barrio llamando a la puerta esa noche. XD. Hemos hecho muchas pero no tantas. Una cosa, en serio, es muy importante que leáis toda la receta completa y hagáis caso de las indicaciones. Los ojos son muy divertidos pero es mejor que los quitéis si los que se lo comen son niños pequeños… os he dejado en notas el porqué.
Por cierto, he puesto también presidiendo la mesa del comedor la gran calabaza tamaño Ruperta que usamos en el video de Halloween que grabamos la semana pasada para el post de decoración de Halloween en tu jardín. Lo vuelvo a colgar aquí por si no lo habéis visto. Una pasayada. Lo pasamos bomba grabándolo y sorteando la tormenta de lluvia que se nos venía encima y de la que nos libramos por los pelos. Equipazo con Clara y Camilo a los que las tormentas no les gustan nadaaaaaa
¡Disfrutad mucho!
- Para 14-16 Cookie Monster para Halloween:
- 185 g de harina de trigo
- 60 g de cacao en polvo
- una pizca de sal
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 60 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 80 g de azúcar morena o panela
- 80 g de azúcar blanquilla
- 1 huevo M
- 1 cucharadita de vainilla líquida
- 1-2 cucharaditas de colorante negro extra Sugarflair®-opcional-
- 100 g de pepitas de chocolate Vahiné®
- Para decorar:
- Mini Ojos de azúcar para decorar las galletas de Wilton®
- Ojos grandes de azúcar Wilton® -son comestibles pero no recomiendo comerlos, solo los vamos a usar como decoración-.
- Pon en el vaso de la Thermomix® la harina, el cacao, la pizca de sal y el bicarbonato y mezcla todo durante 30 segundos en velocidad progresiva 5-9. Retira y reserva.
- Pon en el vaso la mantequilla a temperatura ambiente con el azúcar moreno y blanco y bate 1 minuto en velocidad 3.
- Incorpora el huevo, la vainilla y el colorante negro y mezcla 1 minuto en velocidad 3.
- Añade la mezcla de ingredientes secos y mezcla 30 segundos velocidad 3. Incorpora las pepitas de chocolate y vuelve a mezclar a la misma velocidad y tiempo.
- Retira del vaso, forma bolitas y deja reposar en la nevera o e congelador 15 minutos. Mientras precalienta el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.
- Introduce las galletas y hornea a 180º con calor arriba y abajo, durante 18-20 minutos. Retira del horno e incrusta los ojillos para que tus galletas se conviertan en las Cookie Monster. Deja enfriar sobre una rejilla y listas para comer. Listo.
Tampoco se recomiendan estos productos para aplicaciones de horneado, no aguantan bien las altas temperaturas.