A veces los sueños se cumplen y yo he soñado muchas veces con esta maquinita que descubrí a través de los blogs de cocina. ¿Puedo hacer de abuela cebolleta? Os voy a contar una historia… :D
La imagen de Nueva York estaba en mi cabeza tras tantas y tantas películas. Supongo que había recorrido Manhattan muchas veces sin conocerla como tantos de nosotros que crecimos con esas películas americanas. Hace unos años tuve la oportunidad de pisarla de verdad, que ilusión me hizo. Me faltó besar el suelo americano cuando bajé del avión, pero como no sales directamente a pista, no merecía la pena poner los morros en los azulejos gastados del aeropuerto. Muchas colas para salir de allí y entrar y muchos mitos caídos :D ¡Que pequeña me pareció la estatua de la libertad, si era como un Click de Famobyl®! Más pequeña que yo :D. Lo de Times Square fue un desastre: “¿Esto es Nueva York?, ya me puedo ir”.
No me gustan las aglomeraciones, las pantallas de colores, las luces por todas partes, así que Times Square simplemente me horrorizó. Pero con el paso de los días vimos el otro Nueva York, con su maravillosa biblioteca, la Gran Estación, los paseos en bicicleta por Central Park, el viaje en ferry a Staten Island… Siempre me pasa, las cosas que menos cuestan muchas veces con las más maravillosas. Nos fuimos de ese viaje con ganas de más… y volvimos.
El segundo viaje fue el mejor. Esta vez además teníamos amigos que vivían allí, así que lo vivimos desde dentro. Comimos en sitios muy normales de esos que molan de verdad, bebimos, salimos por las zonas de moda, paseámos por Brooklyn, por el Bronx, por Harlem, por todas partes… y nos subimos a la montaña rusa de madera -casi me desmonto-, fuimos a la playa a Coney Island y comimos las famosas salchichas del Nathan’s original :D y caminamos muchísimo…horas y horas, y en uno de esos paseos nos encontramos varias tiendas de cositas de cocina… yo miraba, solo mirabaaaa… nada de gastar, cabeza fría :D. Y recuerdo cuando vi esa KitchenAid® con acabado de Níquel pulido, preciosísimaaaa. Me enamoró, era elegante y robusta, pero por desgracia, nuestro amor solo duró unos minutos, los que estuvimos en Williams Sonomadisfrutando de todo lo que allí había :D Todavía debo tener en algún disco duro la foto que le hice a Javi al lado de esa preciosa machine, y desde entonces siempre la he tenido en mi cabeza pero jamás la había vuelto a ver, y aunque se he pensado muchas veces en comprarme la kitchen, siempre había ganado la razón al corazón… hasta que el día 3 de diciembre, a un mes justo de mi cumpleaños, llegó un paquete a mi casa…
La caja venía de mi tienda favorita “Claudia&Julia”… y creo que me adelanté un poco porque estaba sola, con los perros y no me pude contener. Aquello era para mi, seguro… No esperé a que Javi llegase a casa para ver mi cara de emoción, estaba demasiado intrigada. Con el cuchillo de las patatas, corté la cinta adhesiva y abrí las lengüetas de la caja… estaba rellena de papel. Empecé a tirarlo por el suelo…:D braceando como una experta nadadora y Camilo no paraba de saltar para intentar morder algún trozo. Clara estaba a mi lado tan intrigada como yo y muy tranquila viendo el espectáculo. Debajo de aquel protector, había una caja de cartón grande con un dibujo de una KitchenAid® roja. “Madre mía, madre mí, madre mía” como diría Cheliño… era una KitchenAid®, la que yo recordaba en mi cabeza… la de aquel viaje de hace bastantes años.
Llamé a Javi y me dijo que llegaría en un ratito… que cara de tonta tenía, estaba embobada…. y la besé :DDD Era mi regalo de cumpleaños, supongo que Javi quería que la disfrutase desde ya, ya somos mayores, para que esperar :D Desde luego si hubiese querido guardarla, no sé donde iba a esconderla en nuestro apartamento :D
Y puse la cocina patas arriba para ponerla en el lugar que se merece…. y aquí os la muestro. ¡¡¡Estoy todavía con la emoción a flor de piel!!!
Gracias por compartir estos momentos conmigo.
Ro
¿Qué es una KitchenAid®?
Bueno, he tenido que empaparme todo lo que he podido de la máquina para empezar a usarla. Así que si alguien todavía está pez con la KA os dejo unas notas para que sepáis como funciona.
La KitchenAid® es una amasadora, batidora y mezcladora estupenda que se creó en 1919 en EEUU con el nombre “ayuda en la cocina”. Un clásico americano, de estilo retro y que funciona como ninguna por su “acción planetaria” que monta perfectamente claras y nata. Nada incompatible con la Thermomix®. Es mucho más profesional en esas materias. Hoy la he usado por primera vez con algo sencillo como una masa y ¿sabéis que he echado de menos?… una báscula. Hay que poner ingredientes pesados y ella no pesa, menos mal que la tengo al lado de mi otra maquinita y no aporta calor :D, ahora entiendo porqué las recetas americanas miden por tazas… muy práctico.
Tiene 10 velocidades, que se usan de la siguiente manera:
Velocidad 1.- Se utiliza para remover lentamente: ligar, hacer puré, comenzar todos los procesos de mezcla… En esta velocidad podrás añadir harina sin que esta se vaya por fuera y añadir ingredientes secos o líquidos.
Veocidad 2-3.- se usa para mezclar lentamente: para deshacer una grasa en la harina, con mezclas poco espesas que pueden salpicar, para amasados con levadura no se debe pasar de esta velocidad
Velocidad 4-5: se usa para mezclar y batir: esta es una velocidad media que se usar para ligar azúcar y mantequilla, para mezclas semi espesar, para añadir azúcar a las claras de huevo para hacer merengues.
Velocidad 6-7: subimos la velocidad ya para batir enérgicamente: para hacer cremas a velocidad media rápida.
Velocidad 8-9: se usa para batir o mezclar rápido: batir crema, claras de huevos y merengues, italianos o cocidos.
Velocidad 10: se usa para mezclar muy rápido: mezclar rápidamente pequeñas cantidades de crema o claras de huevos.
Tiene varios accesorios:
- Batidor plano: es para mezclas de normales a espesas, en masas de pasteles, galletas, glaseados, panes rápidos, caramelos, galletas dulces, puré de patatas, masa para tartas…
- Gancho amasador: para mezclar y amasar masas con levadura, sobre todo para panes y bollos.
- Varilla batidora de alambre: imprescindible en las mezclas que necesitan que se incorpore aire, para montar claras de huevos, hacer pasteles esponjosos, cremas espesas, mayonesa y merengue.
- Tapa anti salpicaduras: Con vertedor de ingredientes, según modelo, no todos los traen.
- Bol de acero inoxidable: Con capacidad para 5-7 litros dependiendo del modelo.
Accesorios para KitchenAid®:
Hay montones de accesorios para acoplan en el frontal de la maquina o van el lugar del bol, algunos de ellos para que os hagáis una idea son…
- Heladera, con una capacidad de hasta 1.9 litros de helado, sorbete y postres congelados.
- Exprimidor para cítricos, para zumos…
- Licuadora “SlowJuice”, para hacer zumos de verduras de todo tipo, este me encanta y yo lo tengo suelto de la marca Hurom® y es fantástico. La de KitchenAid® tiene 3 filtros de diferente grosor para que los zumos o salsas lleven más o menos pulpa.
- Cortadora rebanadora para cortar verduras, quesos, etc…
- Accesorio para pasta, para alisar la masa y cortar en espaguetis o tallarines.
- Prensa para pasta fresca, para espagueti, bucatini, rigatoni, fusilli…
- Picadora de carne, para que hagas hasta salchichas caseras :D
- Espirilizadorpara decorar tus platos con verduras y frutas cortadas en circular o espiral, para pelar, laminar y/o hacer tiras gruesas y finas.
- Procesador de alimentos. para cortar frutas y verduras del grosor que quieras, en tacos, juliana, triturado…
- Colador de frutas, para preparar compotas, sopas, papillas.
- y mucho mássss… abridores de latas, moldes para raviolis, vaso de cristal, molinillo de cereales, fundas para cubrir la máquina, secador de pasta fresca, bol para baño maría, etc.
Tipos de KitchenAid® en España:
La KitchenAid® se vende en España en 4 formatos, el Classic, el Artisan, los Heavy Duty y el Profesional, todos con motores diferentes y con distintas capacidades de bol.
- La KitchenAid® Classic, con motor de 275W, con un bol de 4,2 litros de capacidad, vaso sin asa. Es suficiente para uso doméstico. Con cabezal abatible. Es la más económica y ronda los 400 euros. Modelo 5K45SS, ah! y no tiene tapa antisalpicaduras.
- La KitchenAid® Artisan con motor de 300W, con un bol de 4,8 litros de capacidad, vaso con asa. Con cabezal abatible para que quitar el bol sea más sencillo, para verter los ingredientes más fácilmente. Mi modelo es este 5KSM150 en acabado Níquel pulido. El vaso se enrosca a la base y el asa es muy cómoda. Hay montones de colores: Rojo, rosa, fucsia, plata, blanco perlado, blanco, negro, terracota, etc… el más habitual en las casas, perfecto para uso doméstico.
- La KitchenAid® Heavy Duty con motor 315W, con un bol de 4,8 litros de capacidad.El vaso se sujeta a unos brazos móviles que permite poner el cuenco en diferentes alturas y aporta mayor estabilidad. Más grande que la Classic y Artisan y más revoluciones por minuto que estos modelos.
- La KitchenAid® Heavy Duty con motor 500W, con un bol de 6,9 litros de capacidad.El vaso se sujeta a unos brazos móviles que permite poner el cuenco en diferentes alturas y aporta mayor estabilidad. Más grande que la Classic y Artisan y más revoluciones por minuto que estos modelos. Esta tiene el asa abierta que para los profesionales puede venir muy bien.
- La KitchenAid® Profesional con motor 325W, con un bol de 6,9 litros de capacidad. El vaso se sujeta a unos brazos móviles que permite poner el cuenco en diferentes alturas que dan estabilidad, además tiene un conmutador de parada de emergencia y una protección metálica para el uso industrial. Modelo 5KSM7990. Esta tiene el asa abierta que para los profesionales puede venir muy bien.
Pues creo que os he explicado casi todo. Desde luego los accesorios para KitchenAid® no son muy baratos, así que os aconsejo mirar siempre en Claudia&Julia donde me han conseguido este color que no lo he visto en ningún otro sitio, aprovechad el descuento del 5% usando el código “Velocidad Cuchara”. También mirad precios en María Lunarillos donde también tenemos un 5% de descuento con el código “VCuchara” y por último en Amazon. Si por precio os viene bien, comprad en tiendas de aquí que hay que dar de comer a los pequeños comerciantes.
Un besazo… me voy a montar merengue.