Cada mes suelo darme un caprichito… creo que ya os lo he contado. Me reservo unos pocos euretes para ir haciendo acopio de moldes, cazos, etc… En función de los gastos del mes y de las cositas que necesite para el blog me pido una cosa u otra… y esta vez tenía ganas de hacerme un molde de “Angel Food Cake” porque para hacer la receta no sirve cualquier molde antiadherente, además necesito que mi molde tenga patitas , ahora os explico porqué.
Estos moldes no son excesivamente caros. Como todo dependerá de cuantas veces lo vayas a usar y de si te merece la pena. Yo estoy segura de que le sacaré partido, como a todos lo que tengo, así que los 22,90 euros me los gasto contenta, uso el código “VelocidadCuchara” y me quedo tan a gusto.
¿Qué es un Angel Food Cake?
Es un bizcocho esponjoso hecho con claras también llamado “Comida de ángeles”, lleva azúcar y un poco de harina. Siempre se usa además un poco de sal que potencia el dulzor y el Cremor tártaro que es un estabilizador de claras. Este bizcocho no lleva nada de grasas, es súper ligero y su origen es americano, por eso los moldes de Angel Food Cake más conocidos son de las marcas Wilton ® y Nordic Ware ®.
Como lleva tantas claras, lo mejor es comprarlas ya envasadas y pasteurizadas y pasar de los huevos frescos. Si tenéis claras congeladas perfecto, porque además montan muchísimo mejor :D
Normalmente se puede aromatizar para darle más sabor con diferentes esencias, se suele usar la vainilla -a mi me encanta- o la almendra, la avellana, la lima, frutos rojos, naranja, melón, canela, toffe, plátano… Si tenéis una tienda como Comercial Minguez cerquita de vuestra casa, seguro que encontráis todo tipo de aromas para ir cambiando ese toque de sabor.
¿Qué molde es el mejor?
Para preparar este bizcocho de claras es muy importante el molde en el que lo vamos a hornear. No sirve cualquier molde antiadherente porque los resultados no son iguales.
Para hacer un Angel Food Cakeel molde debe ser adherente, si, si… no me he equivocado al escribirlo, adherente. La masa debe pegarse a los bordes, por eso este tipo de moldes los tendremos que usar cuando esté bien limpios de grasas. Nunca se les pone sprays desmoldantes, ni mantequillas, ni aceites. Eso no nos interesa nadaaaaa.
Las patas también son fundamentales. Es cierto que podemos usar una rejilla, pero así es más cómodo. Una vez horneado el bizcocho, hay que dejarlo “colgando” para que no se baje, y esto se consigue dando la vuelta al molde. Las 3 patas lo elevan y separan de nuestra encimera y así se airea el angel food y se va enfriando… el bizcocho no se bajará como pasaría si lo dejases en un molde normal… una vez frio -pasados 50 ó 60 minutos– estará durito pero esponjoso y ya no se aplastará.
¿Y cómo se desmoldan?
Se desmoldan en frío -después de dejarlo boca abajo unos 60 minutos-, con una espátula o una lengua de goma, o con lo que os apañéis mejor… Haz primero de una pasada todo el borde interior y después saca la parte central con el tubo y haz lo mismo con la base. Ya los tienes desmoldado.
El bizcocho ya no es frágil… pero no se puede cortar con un cuchillo normal porque al apoyarlo vamos a aplastar lo que tanto hemos mimado, así que usad un cuchillo de sierra del pan que para esto va perfecto. A mi me encantan los bizcochos espolvoreados con azúcar glass y este no va a ser menos, pero vamos, se aceptan todo tipo de coberturas… eso va en gustos :D
Ahora me tengo que poner a hacer pruebas con la Thermomix® para que estas claras queden perfectas y me salga un Angel Food Cake precioso… ya sabéis que os daré buena cuenta de ello, no?… ¿Vosotros ya lo habéis hecho???? Contadme impresiones :D