Siempre me ha dado miedo el tema de la olla exprés y la olla rápida. Supongo que tenía en mente las antiguas ollas que usaban nuestras madres, algo más rudimentarias. Lo que siempre había oído era lo del “cuidado que puede explotar” y sólo por eso, nunca la había metido en casa, ya he visto explotar una cafetera italiana…. pero las cosas cambian y ya tengo mi olla rápida.
Empezamos por lo básico que yo desconocía. Solía referirme a ellas de las dos formas: olla exprés y olla rápida, pero no son lo mismo, la olla exprés acorta tiempos de cocción en un 50% con respecto al tiempo de cocción normal o tradicional, la olla rápida reduce ese tiempo en un 70%. La diferencia está en los bares de presión que alcanza la tartera en su interior. Las nuevas pasan de los 0,6 bares a casi 1 bar como máximo, es decir que dentro se ponen por encima de los 100ºC que hace que las cocciones sean todavía más rápidas-todo dependerá si se trabaja a baja presión -1 anilla- o a alta presión -2 anillas-. El resultado es un ahorro de tiempo y de energía, sin perder sabor, aromas y nutrientes. Y lo cierto es que las ollas también han cambiado mucho… no hay más que verlas, cada vez son más atractivas.
Lo primero que he cocinado en ellas desde mi vuelta de vacaciones, son guisos de carne y caldos de pollo para ir probando. Ya le he perdido el miedo a abrirla, esta es muy intuitiva, así que compartiré lo que vaya preparando. Os dejo más datos, seguid leyendo…
Cosas buenas de la olla:
- Todas las ollas rápidas que he visto pueden comprarse con diferentes capacidades. Normalmente se venden en juegos de 1 ó 2 piezas con el mismo diámetro para aprovechar la tapadera y así, tengas la olla de 3 litros, 4 litros, 6 litros, etc… podrás seguir usando la misma tapa con todas ellas. Si necesitas más capacidad para hacer un cocido coges la olla grande, si vas a hacer un guiso para 4, con olla de 3-4 litros te sobrará. Es conveniente tener varios tamaños para adaptarlo a las necesidades de cada momento.
- La WMF que yo tengo tiene temporizador con avisador acústico y con piloto de aviso para saber cuando puedes abrir tu olla. Cuando se pone en rojo, la olla está cerrada y se bloquea la apertura, la presión es alta. Cuando el piloto se pone en verde, puedes abrir tu olla con confianza. El temporizador te permite poner cuantos minutos quieres que esté la olla al fuego y comienza la cuenta atrás cuando ha alcanzado la presión indicada con 1 ó 2 anillas que tu eliges. Te avisa para que la apagues aunque tiene un pequeño defecto, la alarma del temporizador suena demasiado baja y si estás trabajando con tu Thermomix® es muy probable que no lo escuches. Hay que estar pendiente.
- Niveles de presión y despresurización rápida. Esta olla tiene como casi todas dos anillas que indican cuanta presión alcanza la tartera en su interior. La elección de la anilla dependerá de lo que vayamos a cocinar. La primera anilla (cocción delicada a 110ºC, 45 kPa de presión de funcionamiento, 90 kPa presión de regulación) se usa para cocinar verduras, pescados y frutas, la segunda anilla (cocción rápida a 119ºC, 95 kPa presión de funcionamiento y 130 kPa presión de regulación hasta 150 kPa) para el resto de alimentos. El mango permite poner que anilla quieres que suba desde el momento en que cierras la olla y este mismo dispositivo permite acelerar el proceso de despresurización para no tener que esperar mucho en abrirla. Es realmente cómodo y fácil de usar. El mango además dispone de un chivato de luz, un piloto que se pone rojo y bloquea la apertura de la olla cuando ha cogido presión y que pasa a verde cuando está la olla despresurizada y está lista para abrir con seguridad. Esta parte de esperar a poder abrirla era la que más temía y con estas nuevas ollas no puede ser más fácil.
- El tiempo de cocinado se reduce notablemente. Una carne que cocinarías de forma tradicional tendrías al fuego 90 minutos, pasa a a hacerse en 20-30 minutos, quedando melosa , con un sabor muy concentrado y delicioso. Quedan espectaculares.
- La cantidad de líquidos. Ojo, no te pases con los líquidos que apenas se evaporan en la cocción. Es cierto que se reducen más de lo que yo esperaba -o es que todavía no le he cogido el truco y estoy cocinando muy fuerte- pero menos que si cocinase en una olla tradicional a fuego lento, lo que si concentra es muchísimo el sabor.
- Ahorro energético: una vez que tapas tu olla, y pones tu cocina a tope con la indicación de en que anilla va a trabajar, podrás bajar la temperatura de tu cocina. En mi caso, mi vitro no me permite bajarla al mínimo porque no me mantiene la presión y se me bajan las anillas, por eso hay que buscar el equilibro del mínimo consumo y máxima eficiencia. Esto varía mucho en función de la placa que tengas, inducción, vitrocerámica, gas… en cualquier caso, al reducir los tiempos de cocinado, obtendrás ahorro. Y ojo, que si la dejas que despresurice poco a poco con el fuego apagado, conseguimos seguir cocinando con la inercia del calor que tiene la tartera reduciendo el gasto de energía.
- El mango desmontable. Parece una tontería pero no lo es. Puedes lavar la tapa y la goma a conciencia y pasar el mango bajo el grifo -el temporizador nooo que se estropea-. La tartera también puede ir al lavaplatos, pero a mi me gusta lavarlas a mano si tengo tiempo.
- Se cocina de todo pero es muy útil para legumbres, carnes, caldos, cocina al vapor… incluso sirve para esterilizar tarros de cristal, conservas, biberones….
- La cocción rápida es mejor para conservar vitaminas, sabor y olor.
- Una olla rápida te sirve para cocinar de forma normal, de hecho se venden tapaderas de cristal en algunos modelos… así lo tienes todo en uno sin necesidad de tener mil piezas de cocina. Este modelo también trae un accesorio vaporera, -un cesto de inox que se introduce dentro de la olla-. Lo probaré, lo prometo. Por ahora me sigo estudiando todo lo que encuentro para sacarle rendimiento.
Cosas menos buenas:
- El acero con el uso coge manchas por el calor, la fritura, es normal… que rabia, duran nuevas e impolutas los dos primeros días, pero eso como todo. De hecho en la foto he intentado -sin mucho éxito- retocar unas manchitas del uso que no me gustaban como quedaban en la imagen :D Con lo que soy yo para estas cosas, que siempre le estoy sacando brillo…
- Las ollas tienen un límite de llenado, el mínimo son 250 ml de líquidos y el máximo son 2/3 del total de capacidad. Con alimentos que se expanden dentro de la olla como arroz, verduras secas, hay que llenar la olla solo hasta la mitad de la capacidad. Normalmente dentro incorporan una marca para que no te pases.
- Que sea un olla rápida no quiere decir que haga milagros, el sofrito y la preparación inicial de la receta, no te la quita nadie. Si vas a estofar, tendrás que hacer el proceso igualmente, el tiempo que te ahorras es en la cocción de las carnes. Ya te pondré recetas para que lo veas claramente. Por supuesto las recetas de meter todo y poner a cocer existen y son las más tentadoras cuando tenemos prisa :D
- Los temporizadores. He leído en algún foro que el temporizador se estropea. Imagino que como todo lo digital tiene un tiempo de vida útil. Supongo que habrá recambio, pero no es necesario comprar justo la olla rápida del relojito, si tienes horno con programador o el típico temporizador de cocina, el resultado es el mismo. Otro defecto que os he puesto antes por ahí arriba, es que el pitido es para mi gusto demasiado bajo. Si estoy fregando o con la Thermomix® a todo trapo tengo que estar atenta porque no lo escucho, y os aseguro que aún no estoy “teniente”… escucho perfectamente ;) Además el “timer” no se puede mojar. Retíralo antes de lavar el mango bajo el grifo.
- Libros de instrucciones que dan la posibilidad de enfriar la olla bajo el grifo para bajar la presión y evitar el vapor (método 4, página 41 del libro de instrucciones)… Eso si que da miedo :D, ni se me ocurre eso. Es un cambio de temperatura bestial que seguro que puede hacer que vuestra olla se estropee. Eso no lo hacemos con ningún material cerámico, ni se nos ocurre porque sabemos que partirá, pues si quieres que una olla no sufra, no lo hagas. Es una opinión personal, no me tenéis que hacer caso.
¿Cuál es la más adecuada en mi casa?
Para saber que olla rápida necesitas tienes que plantearte una serie de cuestiones básicas. Yo me arrepiento de no haber cogido la oferta de 6.5l y 3 litros, porque soy muy de hacer caldos para sopas, me encantan… pero no pasa nada, la uso más a diario en vez de hacer litros de caldo en una sola vez y ya está. Así tengo también más hueco en el gavetero.
- ¿Para cuántos vas a cocinar? Si sois dos, con la de 3-4 litros será suficiente, si sois cuatro personas os irá bien la de 4,5-6 litros, y si sois seis personas o más la de 6-8 litros. Siempre es mejor que la olla sea más grande y que no tengas que llenarla para cocinar a que no te quepa lo que quieres cocinar si se suma algún amigo a comer ;)
- ¿Qué tipo de comida voy a preparar? Si lo tuyo son los cocidos en familia los domingos y los guisos, está claro. Coge 2 “cuerpos”, la de diario para los guisos y la grande para esas comidas copiosas para muchos. Si eres de cocina normal para los 4 de casa, vete a por la que más se ajuste a vuestras necesidades.
- ¿Qué presupuesto tienes para gastar? en realidad aunque estas ollas no son baratas, en internet hay un montón de buenas ofertas. Busca y si no encuentras, espera… llegará. Lo mejor es mirar y comparar. Busca foros y opiniones de usuarios y si puedes también hablar con un experto en la materia seguro que harás una buena compra. Los precios oscilan mucho en función de las marcas, la mía costó de oferta 145€ más el descuento “VelocidadCuchara” que se nota, oséa, ua buena oferta visto el precio original que era de 263€, pero claro, son un visto y no visto, por eso hay que estar atentos. Mirad que sean de buen acero inoxidable 18/10 y que tengan un buen fondo difusor para repartir bien el calor. Calidad mejor que cantidad.
- ¿Sirve para todo tipo de fuegos? Las nuevas y buenas por supuesto, pero compruébalo, no te vayas a comprar una olla que no sirva para tu inducción… revisa el tipo de material, que sea compatible con lo que tienes en la cocina o lo que esté por llegar.
- ¿Y qué diámetro me pido? A mi me gustan a partir de 24cm de diámetro, esta olla es de 22cm y ya me parece que va justa aunque no es incómoda, pero como era una oferta no me lo pensé más, pero si puedes comprarla de 24, 26 ó 28cm de diámetro, genial, no te arrepentirás.
Estoy leyendo y probando cosillas así que os mantendré al día… y os pondré recetas siempre que queden deliciosas ;)