El calor anima a preparar bebidas como esta. ¿A quién no le gusta una sangría?
Confieso que casi siempre hago la sangría a mano porque me gusta cortar las frutitas a mi manera, en trocitos de bocado por si las sirvo con ellas -depende de la jarra que use nos las comemos o no-, pero os dejo la versión con nuestra máquina por si preferís hacerlo más rápido y así podemos elegir.
Cuando la preparo a mano lavo y corto las frutas en trocitos chiquitines, las vierto en una jarra grande, añado un poco de licor -a veces-, el vino y la gaseosa -suelo poner el doble de gaseosa que de vino pero es al gusto- y lo dejo en la nevera unas horas para que todo coja sabor y macere antes de servir. Luego lo sirvo con hielos y listo.
En la imagen: Dispensador con grifo de 3,8 litros, recuerda abrir la tapa para que la sangría fluya por el grifo. La tabla de madera de olivo es esta que compré hace un par de años. El vaso es de El Corte Inglés.
- 2 melocotones
- 1 pera
- 1 naranja
- 1 limón
- 2-3 cucharadas de azúcar blanquilla -opcional-
- Reservar las pieles de los cítricos para decorar -opcional-
- 80-100 ml de licor al gusto -opcional-
- 750 ml de vino tinto
- 800-1500 ml de gaseosa
- Hielos para los vasos
- Trocea las frutas a mano tras lavarlas y secarlas o trocea en tu máquina. Comienza por el melocotón y la pera programando 2 ó 3 segundos en velocidad 4. Retira y reserva.
- Pon en el vaso la naranja y el limón bien pelados,(sin pepitas, piel y partes blancas) junto con el azúcar, y tritura 1 minuto en velocidad 10.
- Añade el licor, el vino y la gaseosa en cantidad al gusto, los hielos -opcional, lo puedes añadir a los vasos- y el melocotón y mezcla 1 minuto a velocidad 2.
- Vierte la sangría en una jarra y decórala con las pieles de los cítricos.