Tenía ganas de hacerle una foto como se merece a esta receta de solomillo Wellington. Como muchos de los platos que preparamos cada día, este solomillo tiene su historia. Arturo Wellesley (1769-1852) gastrónomo y militar inglés fue el que dio nombre a este solomillo. Tras ganar muchas batallas, en España se le dio el titulo de Marqués de Duero y en Tolousse el de Duque de Wellington. Pasó a la historia por vencer a Napoleón en la batalla de Waterloo y esta receta se elaboró en su honor.
En Francia ya se cocinaba el exquisito “Boeuf en Croutê”, que era un trozo de carne de buey rodeado de hojaldre, pero a Wellington le gustaba la carne con costra, con rellenos en diferentes masas. Así que después de la batalla se le preparó el Solomillo Wellington que ya sería el plato oficial en todas sus fiestas y que difiere del anterior en que lleva solomillo de ternera con una capa de paté de Foie gras, vino de Madeira y entre la capa y el hojaldre unas láminas de trufa y setas. Una delicatessen…
Algunas versiones de la historia, dicen que los ingleses querían tener su propio “Boeuf en croutê” y pusieron este nombre sólo para fastidiar a los franceses. Sea lo que fuere, ambos son deliciosos seguro.
Yo lo he hecho más sencillo, lo he envuelto en cebolla caramelizada que creo que le queda muy bien a la carne. Así que aquí os dejo mi paso a paso. Espero que mis explicaciones os sirvan de ayuda para lanzaros con esta receta que es sencillísima. Váis a quedar como auténticos Duques y Duquesas.
Para saber si la carne está hecha te recomiendo siempre tener un termómetro digital específico, así podrás medir la temperatura del interior de la pieza que para estar en su punto -con zonas rosadas interiores- tiene que llegar a los 60-65ºC. Yo uso este termómetro digital de “El Amasadero” donde además tenemos descuento con el código “VelocidadCuchara” y lo puedes encontrar en Claudia&Julia con el mismo descuento, pero de la marca Gefu® termómetro.
Si sois de buen diente y este va a ser vuestro plato único, preparad dos solomillos… mejor que sobre que que falte :D
- Para la cebolla caramelizada:
- 700 g de cebolla
- 100 g de aceite de oliva virgen extra ó 70 ml de mantequilla más 30 ml de aceite
- 30 g de caramelo líquido* -opcional-
- sal al gusto
- 1 sartén para acabar de dorar la cebolla -opcional-
- Para el solomillo de cerdo:
- 1 solomillo de +500 g de cerdo -puedes hacerlo con ternera-
- 1 chorro de aceite de olivar virgen extra
- 1-2 planchas de hojaldre (1 para envolver y un trozo para el enrejado -aconsejable tener una lámina extra por si no te llega)
- Sal y pimienta al gusto
- 1 huevo batido o en su defecto pinta con aceite*
- Prepararemos la cebolla caramelizada. Para este solomillo te sobrará algo de cebolla, úsala todo o reserva para acompañar el plato. Poner siempre los ingredientes en frío sobre el hojaldre para que no quede blando y se cocina mejor.
- Pon en el vaso la mariposa, vierte la cebolla cortada en juliana, el aceite virgen extra y la mantequilla y programa 30 minutos, varoma, velocidad 1.
- Agrega el caramelo líquido -opcional-, la sal y programa 3 minutos, 100º, velocidad 1. Listo. A mi me gusta pasar esta cebolla por la sartén a fuego medio para que termine de dorarse, con unos 5-8 minutos, será suficiente. Reserva y espera a que enfríe antes de usar sobre el hojaldre.
- Para el solomillo de cerdo: En una sartén vamos a sellar la carne del solomillo, así que pon la sartén un chorrito de aceite y fuego alto...Cuando veas que el aceite está caliente, pon el solomillo en la sartén y séllalo unos minutos por cada lado, verás que aparecerá tostadito. Salpimenta, reserva y deja que enfríe antes de poner sobre el hojaldre.
- Para el montaje: Coge la lámina de hojaldre y ábrela. Vierte en el centro un poco de cebolla caramelizada ya fría y extiéndela con una cuchara. Pon el solomillo encima ya frío, vierte por encima más cebolla caramelizada.
- Recorta los excesos de hojaldre que usaremos luego para decorar nuestro Solomillo Wellington, si tienes un rodillo para hacer rejilla como este, úsalo pasando por encima de la masa de hojadre.
- Cierra la lámina de hojaldre con el solomillo como si se tratara de un paquete. Bate el huevo y pincela las uniones. Pon encima en enrejado y deja la parte fea de base. Pincela todo con el huevo batido para que quede doradito y apetecible :D
- Precalienta el horno a 200ºC con calor arriba y abajo y una vez caliente, introduce el solomillo Wellington durante 20 minutos a 200ºC. Retira, espera 5 minutos a que temple un poco y coja todos los sabores y corta en rebanadas de 2,5-3cm, como más te guste.
- Acómpañalo de una Salsa de frutos rojos como esta.