No, no es lo mismo lavar y dejar la lechuga escurriendo, que hacerlo en un “centrifugador” -os pongáis como os pongáis- :)
Hace muchos años que uso este mismo modelo de escurridor. El primero que tuve era color verde, lo cambie un día para tener el nuevo -ya sabéis coo somos las forofas de ciertos productos- y ahora creo que ha salido el modelo en cuestión en rojo.
El tema de los colores da igual, la marca también, pero el resultado de quitar el agua a una lechuga es indudable. Seguro que pensaréis que menudo bulto grande para la lechuga. Es cierto. Pero yo le doy muchos más usos que el de “centrifugar”.
Usos de mi centrifugador:
1.- Lo uso como escurridor, para pasta que no sean espaguetis ya que los agujeros son grandes.
2.- Para lavar todo tipo de verduras: lechuga, zanahorias, tomates, patatas…
3.- Para poner legumbres en remojo, desalar bacalao, etc…
4.- Cuando amaso a mano, lo hago dentro del bol grande
5.- Para reposar masascomo la de el roscón. Siempre pongo la tapa hermética que no cierro del todo.
Seguro que ahora lo véis más práctico que al principio de este post. El mío tiene unos 5 años. Lo uso prácticamente todos los días, lo lavo en el lavavajillas y listo, pero es cierto que muchas veces si no tengo que levar una masa o centrifugar las lechugas, uso con el mismo fin el varoma y el cestillo de la Thermomix.
La base del Varoma puede servirte de fantástico escurridor… eso os lo cuento otro día.
Besos a todos